Encuadernaciones heráldicas en la BNE

Más allá de su función esencial de protección, la encuadernación suele otorgar al libro el carácter de objeto artístico, y es capaz en muchas ocasiones de contar su historia. Desde que una obra sale a la luz hasta que llega a nuestras manos, puede haber pasado por muy distintos propietarios y haber cambiado de traje en varias ocasiones.

Las cubiertas de un ejemplar nos permiten hacer verdadera arqueología del libro. En ellas podemos encontrar etiquetas de libreros, marcas de encuadernador, notas que indican el precio al que fue vendido en un momento concreto de la historia, el tejuelo con la indicación del lugar que ocupó en las estanterías de una determinada biblioteca, las restauraciones a las que fue sometido, las huellas del fuego que estuvieron a punto de consumirlo o el escudo de un anterior propietario.

La encuadernación ha sido un lugar privilegiado para reflejar los distintos estilos artísticos desarrollados a lo largo de la historia, y en muchas ocasiones nos permite situar geográficamente el taller donde se realizó el trabajo ligatorio, como es el caso de las encuadernaciones mudéjares, trabajadas exclusivamente en la península ibérica, o las de piel de cerdo realizadas en Alemania y Países Bajos.

El vasto patrimonio bibliográfico conservado en la Biblioteca Nacional de España, ofrece al investigador un riquísimo abanico de encuadernaciones históricas que están siendo descritas y fotografiadas con el objetivo de acercar este importante patrimonio tanto a los investigadores como a cualquier ciudadano que quiera disfrutar de ellas.

El análisis de las encuadernaciones heráldicas nos ha permitido reconstruir colecciones históricas, comprender los intereses de sus propietarios, determinar su antigüedad y acercarnos a la compleja y apasionante ciencia del blasón. La importantísima colaboración de especialistas en heráldica y numismática, como nuestro amigo José María de Francisco Olmos, ha sido fundamental para avanzar en este campo y obtener estupendos resultados que ya pueden verse en nuestros registros.

A través de la Comunidad BNE, ponemos en marcha un canal de comunicación con todo aquel que quiera participar en la identificación de escudos presentes en nuestras encuadernaciones, que esperamos sea de vuestro interés.

Las encuadernaciones que proponemos podéis verlas también asociadas al registro del ejemplar en nuestra Biblioteca Digital Hispánica, por si os es de utilidad consultar los datos de la obra encuadernada. Ahora sí, os lanzamos nuestra pregunta:

¿Sabes a quién pertenecieron estas obras?